Carlos Vales, director de CEIDA: “La concienciación social sobre el medio ambiente ha aumentado, pero necesitamos consolidar actitudes y conductas más sostenibles a todos los niveles, desde la ciudadanía a los responsables de la toma de decisiones”

Martes, 4 Octubre 2022

Carlos Vales, director del Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental de Galici (CEIDA) 

 

Carlos Vales, director del Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental de Galicia, lleva toda la vida dedicada a la investigación, conservación y activismo ambiental. Con los proyectos que ha dirigido sobre el área del Golfo Ártabro en Galicia, y que han contado con el apoyo del Programa Pleamar, CEIDA ha logrado grandes avances para la preservación de esta área y de su biodiversidad. Entre ellos, el acercamiento a una declaración ZEPA de esta zona costera, sobre la que se muestra muy optimista.

 

Toda una vida dedicada a la investigación y defensa del medio ambiente. De su larga trayectoria, ¿de que está más orgulloso?

Destacaría 3 puntos. Por un lado, la combinación de activismo ambiental, investigación y gestión. Por otro, la promoción de la conservación de espacios de gran valor natural y la mejora en la gestión de Áreas Protegidas, y finalmente, la contribución a la sensibilización, educación ambiental y capacitación de distintos sectores de la sociedad para hacer frente a los desafíos ambientales

 

El proyecto Ártabro III implica multitud de actividades: observación de aves, generación de bases de datos, seguimiento remoto o tareas de sensibilización. ¿Cuál es la parte más complicada en el desarrollo de un proyecto como éste?

La coordinación de un proyecto tan amplio y diverso en sus acciones como este es un todo reto. El trabajo con aves marinas presenta en general una gran complejidad, ya que el medio marino y las colonias de cría, situadas generalmente en lugares de difícil acceso como acantilados e islotes en mar abierto son escenarios complejos para la realización del trabajo (complejidad técnica, costes económicos, seguridad del equipo, etc.). Materiales y equipos, embarcaciones, autorizaciones, meteorología y estado del mar… coordinar y encajar todos estos aspectos requiere un trabajo metódico y especial atención a múltiples detalles.

 

Por otra parte, el proyecto tiene una importante componente participativo, con la mirada puesta en la búsqueda de consensos sociales sobre la gestión de las áreas marinas protegidas de nuestro territorio. Ser capaz de llegar a la mayor cantidad de agentes posibles y organizar el proceso, teniendo en cuenta todas las variables para facilitar la mayor participación posible, requiere también muchas horas de dedicación.

 

El proyecto continúa trabajando en la gestión integral de las ZEPA marinas del noroeste. ¿Cuál es, en su opinión, la medida más urgente a tomar para la preservación de estos espacios y de su biodiversidad, en especial, de las aves marinas estudiadas en Ártabro II?

Es fundamental seguir completando el conocimiento sobre las poblaciones de aves marinas que queremos conservar en este territorio. Siguen existiendo lagunas importantes sobre algunos aspectos cruciales que ÁRTABRO II comenzó a resolver, pero necesitamos seguir respondiendo a algunas preguntas. Por ejemplo, de cara a la planificación y zonificación de estas ZEPA es fundamental conocer mejor la distribución de nuestras aves en el medio marino y qué áreas son importantes para ellas.

 

Por otra parte, necesitamos definir criterios claros y sólidos para el establecimiento de infraestructuras energéticas en el medio marino que tengan en cuenta la biodiversidad, así como avanzar en el trabajo con el sector pesquero en la búsqueda de intereses comunes para la reducción de la mortalidad accidental en artes de pesca.

  

¿Estamos más cerca de la declaración de la ZEPA del Golfo Ártabro?

Como resultado del proyecto Aves Ártabras, ejecutado gracias al apoyo de la Fundación Biodiversidad a través de la convocatoria del Programa pleamar 2018, el CEIDA realizó una propuesta para la declaración de esa ZEPA, sólida y rigurosa desde el punto de vista técnico-científico y surgida de abajo hacia arriba a través de un proceso participativo. Una vez presentada la propuesta como resultado principal del proyecto, la decisión sobre su declaración ya no es responsabilidad del CEIDA, sino que recae en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

 

La posible ZEPA fue presentada con éxito en el marco de las acciones del proyecto Life Intemares destinadas a detectar carencias en la Red Natura 2000 en el medio marino de España, y forma parte del inventario de zonas clave para la biodiversidad incluidas en la versión actual del Plan de Ordenación del Espacio Marino, por lo que somos optimistas con respecto a su declaración en el corto o medio plazo.

 

¿Por qué es tan importante una figura de protección como ésta?

La ZEPA Golfo Ártabro sería importante porque contribuiría a la conservación de poblaciones clave para diversas especies de aves marinas amenazadas. Las aguas de este golfo, formado por la confluencia de cuatro rías, poseen una elevada productividad, además de una gran diversidad de hábitats tanto para la alimentación, reposo y migración de diversas especies como para su reproducción. Así, esta zona se está revelando de gran importancia para la alimentación de paíño europeo, pardela cenicienta o la críticamente amenazada pardela balear, de la que se registran concentraciones estivales de varios cientos de individuos.

 

En lo referente a las especies nidificantes, estas aguas bañan la única colonia gallega de paíño europeo aún no incluida en un espacio protegido, uno de los escasos territorios de cría de ostrero euroasiático en España (descubierto gracias a este proyecto) y la que es la “estrella” del territorio: la colonia de cormorán moñudo más importante de la costa peninsular ibérica, con el 10% de la población de esta especie en la costa cántabro-atlántica.

 

Y en materia de sensibilización, ¿qué acciones van a desarrollarse en Ártabro III??

Como centro de referencia en materia de educación, sensibilización y divulgación ambiental en Galicia, este es un aspecto troncal en todos los proyectos del CEIDA. En ÁRTABRO III se le dará continuidad a las actividades de sensibilización y divulgación ya iniciadas en las anteriores fases del proyecto. Realizaremos actividades divulgativas sobre el valor de las aves marinas del territorio en colaboración con centros sociales, ayuntamientos, asociaciones o centros educativos. También se elaborará una exposición itinerante sobre esta misma temática para su cesión y exposición por parte de todas aquellas entidades que quieran disponer de ella. Además, se editarán materiales audiovisuales para su distribución en redes sociales y se realizará una campaña divulgativa específica sobre una problemática concreta: el impacto de la contaminación lumínica sobre la pardela cenicienta. Dentro de esta campaña, elaboraremos materiales divulgativos y realizaremos actividades de sensibilización en las localidades próximas a las colonias de esta esta especie.

 

La concienciación y el compromiso medioambiental pasan, sin duda, por una formación temprana ¿Cómo hemos avanzando al respecto en los últimos años?

Se han dado pasos en la buena dirección, pero aún quedan muchos más por dar. La concienciación social sobre el medio ambiente ha aumentado exponencialmente en los últimos años, pero es necesario continuar avanzando para conseguir que ese compromiso tenga reflejo en el día a día, a través de la consolidación de actitudes y conductas más sostenibles a todos los niveles, desde la ciudadanía a los responsables de la toma de decisiones. En ese sentido, es clave una educación y formación ambiental transversal a todos los niveles. No podemos dejar el cambio en manos de las generaciones futuras, porque no llegará a tiempo; la educación ambiental debe pues llegar a todos los estratos sociales: comunidad educativa, ciudadanía, sectores económicos y decisores. Creo que será importante conseguir una aplicación real del recientemente aprobado Plan de Acción de Educación Ambiental para la Sostenibilidad.

 

El cambio climático es un problema a nivel planetario, pero ¿cómo está afectando a Galicia en particular? ¿Cuáles son las problemáticas ambientales más acuciantes y cómo debemos hacer partícipe a la ciudadanía de estos?

Por su carácter costero, Galicia es altamente sensible al cambio climático. La importancia de nuestras rías, ecosistemas someros increíblemente biodiversos y altamente productivos, de los que depende buena parte de la economía gallega, implica que modificaciones significativas en el nivel del mar o en las condiciones oceanográficas podrían tener consecuencias ambiental y socioeconómicamente muy relevantes. Los propios pescadores, a través de las encuestas realizadas en ÁRTABRO II, ya se muestran preocupados por los cambios que están percibiendo en los stocks de pesca, con la aparición cada vez más frecuente de especies desconocidas hasta la fecha.

 

Del mismo modo, los efectos están empezando a notarse en muchos otros ámbitos, como el agrícola, el hidráulico o en el potencial aumento en la proliferación de especies exóticas invasoras. Es crucial hacer llegar a la ciudadanía el mensaje de que el cambio climático es una realidad que afectará de manera directa a sus vidas, a su economía, y que no hablamos de previsiones en un futuro incierto, sino que es algo que ya está aquí y sobre lo que hay que actuar ya.

 

El turismo es una de las actividades socioeconómicas más destacadas del área de estudio que abarca el proyecto. ¿Qué mensaje lanza al turista que decida visitar esta parte del país?

Creo que es importante que sea consciente de que visita una zona intensamente humanizada, pero que a pesar de eso tiene la suerte de poseer todavía tramos de costa en un buen estado de conservación y poco alterados, lo que supone una riqueza para el territorio y un recurso de primer orden. Sin embargo, es necesario que se mantenga de esa manera, para que esa riqueza ambiental y paisajística que lo ha traído hasta aquí no desaparezcan.

 

Es importante avanzar en el concepto de ecoturismo y que el mensaje que llegue a nuestros visitantes vaya en esa línea, atraer la llegada de visitantes respetuosos con este entorno ambiental y sociocultural.

 

En ese sentido, gran parte de nuestro ámbito de actuación forma parte de la Reserva de Biosfera Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo, de cuya gestión el CEIDA es parte integrante y que está desarrollando un ambicioso programa en el ámbito del ecoturismo. Gracias a ello, la Reserva de Biosfera es entidad gestora del Geodestino A Coruña e As Mariñas, se ha constituido como el primer Destino de Galicia certificado de Ecoturismo, a través del Club de Ecoturismo Estatal y adherido como como Destino de Calidad Turística SICETD, en el marco de FITUR 2020. Buscamos atraer turismo de calidad comprometido con el territorio y que consuma producto de calidad, local y de cercanía de productores y empresas de restauración locales integrados en la asociación de ecoturismo de la Reserva de Biosfera.

 

Dirige, además, el centro de educación ambiental referente en Galicia. ¿Qué otros proyectos de la entidad destacaría?

Como centro de referencia en educación ambiental en Galicia, el CEIDA lleva más de 20 años trabajando de manera transversal a través de múltiples proyectos  y programas educativos, formativos y de capacitación en los que anualmente participan miles de ciudadanos y alumnos.

 

Recientemente, hemos finalizado el proyecto “Zostera. Praderas marinas, tesoros de biodiversidad”, de dos años de duración y también ejecutado gracias al apoyo de la Fundación Biodiversidad, que incluyó un ambicioso programa educativo con los centros escolares del litoral para divulgar y poner en valor estos ricos pero desconocidos ecosistemas.

 

Además, en un marco de colaboración permanente con otras entidades e instituciones, estamos desarrollando dos potentes programas educativos en colaboración con las Diputaciones Provinciales de A Coruña y Pontevedra. En la provincia de A Coruña el “Programa educativo por una transición ecológica” busca divulgar entre la comunidad educativa la importancia de la biodiversidad y conservación ambiental a través de tres ejes fundamentales: espacios naturales protegidos, cambio climático y océanos y contaminación marina. Durante el pasado curso escolar participaron en las diversas actividades del programa más de 6.600 alumnos de 45 centros educativos de la provincia. Además, estamos desarrollando el programa educativo del Proyecto Revitaliza, ambicioso y pionero proyecto de gestión de residuos orgánicos y compostaje comunitario, en el que este último curso han participado más de 9.000 alumnos en las 534 actividades realizadas.